Una
de las áreas que se ocupan las pruebas PISA es la de la competencia Lectora
¿Cuáles son las variables de situación consideradas? Las siguientes
definiciones fueron ofrecidas por los organizadores.
La definición de
situación se tomó del estudio del Consejo de Europa sobre el lenguaje. Se
identificaron cuatro variables de situación: lectura para fines privados,
lectura para fines públicos, lectura para fines profesionales y lectura para
fines educativos. Aunque la intención de la evaluación de la competencia lectora
de PISA es medir los tipos de lectura que tienen lugar tanto dentro como fuera
de las aulas, la definición de situación no podía basarse exclusivamente en el
lugar en el que se llevaba a cabo la actividad. Los libros de texto, por ejemplo, se
leen tanto en la escuela como en el hogar, y ni el proceso ni el propósito de
su lectura difieren mucho en uno u otro lugar. Además, la lectura también está
influida por el uso al que la destine el autor, por los diferentes tipos de
contenido y por el hecho de que a veces son terceros (por ejemplo, docentes o
superiores profesionales) quienes deciden qué ha de leerse y con qué fin.
Así pues, a efectos
de esta evaluación, la situación puede entenderse como una categorización
general de los textos según el uso pretendido por su autor, según la relación
con terceros relacionados implícita o explícitamente con el texto y según su
contenido general. Los textos de muestra fueron extraídos de una variedad de
situaciones con el fin de maximizar la diversidad de contenidos en el estudio
de la competencia lectora. Se puso especial cuidado en la selección de los
textos según su origen. El objetivo de la selección era llegar a un punto
intermedio entre la definición general de la competencia lectora que emplea
PISA y la diversidad lingüística y cultural de los países que participaban en
el estudio. Solo así podía garantizarse que ningún grupo se viera favorecido o
desfavorecido por el contenido de la evaluación.
Las cuatro variables
de situación tomadas del estudio del Consejo de Europa pueden describirse de la
siguiente manera:
• Lectura para fines privados
(personal). Es aquella que lleva a cabo una persona con el fin de satisfacer
sus propios intereses, ya sean de orden práctico o intelectual. También se
califica así a la lectura encaminada a entablar o conservar relaciones
personales con otras personas. En esta categoría se encuentran las cartas
personales, así como los textos de ficción, biográficos o informativos que se
leen por curiosidad, o como parte de actividades recreativas o de ocio.
• Lectura para fines públicos. Es
aquella que se practica para tomar parte en actividades sociales o comunitarias;
por ejemplo, la lectura de impresos oficiales o de textos informativos sobre acontecimientos
públicos. Por lo general, estas actividades comportan un contacto, más o menos
anónimo, con otras personas.
• Lectura para fines profesionales
(entorno laboral). Aunque no todos los jóvenes de 15 años tendrán que leer en
sus entornos laborales, es importante calibrar la capacidad de una persona de
esa edad para introducirse en el mundo del trabajo, pues en la mayoría de los
países más del 50 % de ellos pasarán a formar parte de la población laboral en
un plazo de uno o dos años. Las tareas típicas de esta categoría suelen
recogerse bajo la fórmula «leer para hacer», ya que están encaminadas al
desempeño de una tarea inmediata.
• Lectura para fines educativos. Este
tipo de lectura suele formar parte de la adquisición de conocimientos dentro de
una tarea educativa más amplia. Con frecuencia, los materiales escritos no los
escoge el lector, sino el docente. Normalmente, su contenido ha sido
explícitamente elaborado para cumplir una función formativa. Las tareas típicas
de este tipo de lecturas se identifican con la función «leer para aprender».
Extraído de
PISA 2006MARCO DE LA EVALUACIÓN
Conocimientos y habilidades en Ciencias, Matemáticas y Lectura
No hay comentarios:
Publicar un comentario